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La exposición “Sin Abrigo”, de
la Argentina Judía Marcela Kreiman, muestra a través del arte, los 22 años transcurridos
desde el atentado a la Amia (Asociación Mutual Israelita Argentina), se
encuentra ubicada actualmente en la ciudad de Lima, en el museo MAC (museo de
arte contemporáneo) hasta el 16 de Octubre.
Buenos Aires, 1994, la
ciudad y el año que marcaron en la vida de la creadora de esta excepcional
exposición, pues luego del atentado hacia la Amia (coche bomba), que dejó 85
muertos, entre ellos a su madre; la vida de Marcela dio un giro radical,
dejándola en una profunda depresión de la cual decidió transformar en obras de
arte.
La exposición muestra 10
obras de arte (Vacío, sus rostros, Memoria, Dolor, Herencia, Sociedad,
Impunidad, Visión, Sus nombres y Realidad); según el guía de la exposición,
Mauricio Fernández, cada uno de los nombres que eligió Marcela para sus obras,
tienen un significado de lo que fue todo el proceso de vacío que sintió tras
perder a la persona que le dio la vida.
La primera exposición
llamada “Impunidad”, es tal vez la que más sentimiento tiene para Kreiman, pues
hasta la actualidad, el atentado sigue sin encontrar un culpable. En esta
pintura se muestra un corte netamente extracto, que juega con las franjas de
color en el cual resalta el rojo, que como bien dice el guía Fernández, el rojo
en esta pintura se manifiesta para Kreiman como una protesta al gobierno
Argentino, por toda la sangre que dejó el atentado sin encontrar al
responsable.
Podemos observar en cada
pieza de esta exposición, que todos son objetos funcionales de uso cotidiano
re-significados para adquirir un valor testimonial o simbólico, como es el caso
de la pieza “Herencia”, en donde se muestra la camisa que usó Kreiman en el
velorio de su madre, que se encuentra rota en la parte del corazón. Ésta es una
costumbre Judía que se realiza luego de perder a un ser querido.
“Vengo siempre a MAC, me
gustan mucho sus exposiciones y ésta me ha dejado impresionado, pues yo creo
que cada pieza de arte muestra un sentimiento profundo y creo que no hay otro
sentimiento de dolor más profundo que perder a una madre”, estas fueron las
declaración del espectador José Espejo, quien venía por segunda vez a observar
la exposición. Por otro lado, la espectadora Judía Rafaela Caspe, admiró el
ingenio de la creadora de la exposición “Sin Abrigo”, por mostrar de forma
creativa, un tipo de luto diferente.
“Sin Abrigo”, se presenta
por tanto, como un espacio significativo que busca que la capacidad de sentir y
pensar entre dos fuertes vínculos se acreciente. Por ello, las piezas mostradas
actúan como un soporte para la memoria de Kreiman.
